TEP metabólica para signos más tempranos de enfermedad coronaria

La tomografía de emisión de positrones (TEP), una técnica en la cual las aberraciones pequeñas en el metabolismo celular pueden darles pistas a los médicos sobre eventos cardiacos próximos a ocurrir, incluyendo la muerte súbita por un ataque cardiaco, se ve mejorada por la angiografía convencional.

Los investigadores presentaron sus hallazgos durante el congreso anual de Imagenología Molecular y Medicina Nuclear 2013, realizado del 8 al 12 de junio en Vancouver, Columbia Británica, Canadá. La enfermedad arterial coronaria (EAC) es uno de los asesinos más predominantes y asintomáticos.

“Mediante el uso de la FDG TEP podemos detectar fácilmente cambios que ocurren en el corazón a nivel microscópico, mucho antes que cuando los cambios son evidentes en la angiografía”, dijo Arun Sasikumar, MD, MBBS, investigador principal del departamento de medicina nuclear en el Instituto de Postgrado de Educación e Investigación Médica (PGIMER; Chandigarh, India). Al detectar los cambios negativos en el corazón en una etapa temprana, los médicos pueden formular medicamentos que pueden detener la progresión de la enfermedad, previniendo así un evento cardiaco devastador como un ataque cardiaco o muerte cardiaca súbita”.

Existen varias formas de detectar la EAC incluyendo el uso de la angiografía, que utiliza energía de rayos-X y medio de contraste que se hace pasar a través de las arterias principales para revelar detalles estructurales sobre el estado de los vasos sanguíneos, incluyendo los casos de estrechamiento y reducción del flujo sanguíneo que se desarrollan por la acumulación de placas y la cicatrización asociada con la ateroesclerosis. Otro método importante es la imagenología de la perfusión miocárdica con estrés (MPI) o técnicas de imagenología molecular que suministran información vital sobre la viabilidad del músculo cardiaco.

Las pruebas de esfuerzo MPI les informan a los médicos sobre el flujo sanguíneo y aspectos de la función cardiaca con niveles diferentes de estrés, haciendo que los pacientes alcancen un porcentaje objetivo de su tasa cardiaca máxima usando estrés por ejercicio o farmacológico, que provoca efectos sobre el corazón similares a los del ejercicio. Un tercer método es el uso del agente de imagenología F-18 fluorodeoxiglucosa (FDG), que es detectado por la TEP. La FDG inyectada se dispersa por el corazón y actúa de manera similar a la glucosa como fuente de energía para las células cardiacas. El método demuestra claramente la función cardiaca actual y el flujo sanguíneo antes de que el estrechamiento importante (estenosis) y la disminución del flujo sanguíneo isquemia sean evidentes con las angiografías convencionales.

Para este estudio los investigadores compararon la angiografía con dos métodos de imagenología molecular, la prueba de estrés MPI con el agente Tc-99m tetrofosmina y la imagenología TEP cardiaca, en la prueba de ejercicio con F-18 FDG, para ver cuál podía detectar de mejor forma la EAC. Un total de 45 pacientes con una edad promedio de 51 años participaron en el estudio. Cada uno tenía una EAC sospechada en el momento de la evaluación, pero sin historia de ataque cardiaco. A cada participante del estudio les formularon restricciones dietéticas y les practicaron pruebas de esfuerzo con ejercicio, en días separados, seguidas por un angiograma al mes.

La angiografía fue realizada como un protocolo de imagenología basal para comparar la MPI y a FDG TEP. Se encontraron angiogramas anormales en 27 pacientes con estenosis, de más del 50%, en por lo menos una arteria. La estratificación de la enfermedad fue ordenada en tres categorías: de enfermedad en uno, dos o tres vasos.

Los resultados de la comparación entre los angiogramas y dos modalidades de estrés molecular indicaron que 17 pacientes tenían enfermedad en un solo vaso y tenían mejores imágenes con la FDG TEP que por la MPI. Un total de cinco pacientes tenían enfermedad de dos vasos y en otros cinco se descubrió que tenían enfermedad en tres vasos. Los hallazgos que compararon la MPI y la FDG TEP para la enfermedad en varios vasos era similar, pero la última era mejor para la enfermedad de un solo vaso. Se demostró que la FDG TEP tenía una sensibilidad de 96% para la identificación de menos de 50% de estenosis de las arterias coronarias, en comparación con alrededor de 56% de sensibilidad con la MPI. La especificidad, la efectividad de la tecnología para detectar la EAC a este nivel, fue determinada en 76% por la FDG TEP y 62% por la MPI, estableciendo que la FDG TEP detecta etapas más tempranas de la enfermedad.

“Esta investigación es extremadamente importante porque abre la posibilidad de usar la medicina nuclear en la cardiología preventiva”, concluyó el Dr. Sasikumar “La FDG TEP puede detectar la isquemia en una etapa muy temprana aún antes de que aparezcan síntomas significativos. Esta técnica de imagenología molecular podría ser usada inicialmente para la detección inicial de la EAC para ayudarles a los médicos a determinar mejor el riesgo cardiaco de un paciente y administrar el cuidado de esos pacientes, que de otro manera sería considerados como con una función cardiovascular normal”.

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Post Graduate Institute of Medical Education and Research